¡No hay eventos!
Top

Hay empresas de transporte que están abandonando la actividad y eso explica la falta de camiones

Asi lo expresó Natalia González, gerente de Operaciones y Comercial de ITSA en el primer desayuno virtual del año organizado por la Asociación Argentina de Logística Empresaria (ARLOG) el jueves 29 de abril, a través de la plataforma Zoom y en simultáneo por YouTube. En el encuentro también disertaron Oscar Desanzo, gerente de logística de Bavosi; Javier Rojo, gerente de Logística de Seaboard Energías Renovables y Alimentos,

Cerca de 200 personas fueron parte del webinar virtual que abordó las principales problemáticas del transporte de cargas: la elevada demanda, la falta de unidades y el desbalanceo de cargas entre origen y destino.

La mirada desde las pymes

En su carácter de gerente de Logística de la comercializadora de alimentos nacionales e importados Bavosi, Oscar Desanzo señaló que uno de los principales problemas logísticos es el desbalance entre zonas de producción y de consumo: “Tenemos corredores desbalanceados en zonas de altísima producción como Cuyo y el NOA. Otra zona donde encontramos una doble complicación es en Mar del Plata”.

Otros inconveniente, a su juicio, es el de diferencias significativas de tarifas para las mismas zonas y distancias; los cortes de rutas o de los accesos a los puertos que disminuyen la oferta de unidades; las demoras en los límites interprovinciales y los impuestos en las distintas jurisdicciones.

La mirada desde las grandes empresas

A su turno, Javier Rojo abordó la problemática en el transporte desde tres perspectivas: el mercado, el nivel de servicio y la rentabilidad de la cadena de valor. “Nosotros estamos ubicados en un complejo agroindustrial en Orán, Salta. Tenemos un flujo de productos, sobre todo azúcar, que se destina en un 50% al AMBA”, señaló como introducción el gerente de Logística de Seaboard.

“Entre junio y setiembre, hay una necesidad de cargas desde el norte hacia los puertos generada por los cítricos, el tabaco, la soja y el maní. Y eso revierte el balance de cargas. El costo del desbalance mayormente lo paga el que tiene mayor necesidad”, aseguró.

La mirada desde las empresas de transporte

Por último, Natalia González, gerente de operaciones y comercial de ITSA, afirmó que la planificación es muy difícil de sostener y los cuellos de botella por falta de disponibilidad de unidades se repiten periódicamente: “El capital de trabajo que las empresas de transporte necesitan para funcionar es muchísimo más alto que el que necesitaban el año pasado. Por esta razón, muchas empresas decidieron dejar de trabajar y eso explica la falta de unidades”.

“Si las empresas quisieran salir a invertir y ampliar su flota, no hay entregas ni de camiones, semis o acoplados hasta diciembre. Otro problema es el desbalance financiero, ya que todos los costos del transporte son al contado o anticipado, mientras que los plazos de cobranza rondan los 45 a 50 días. Otro punto que afecta a la falta de unidades son las negociaciones constantes sobre los ajustes tarifarios. Con los constantes recortes de los incrementos las empresas no pueden reinvertir para renovar su flota”, completó.

Compartir